-HÁBITAT 2,
A veces queda difícil,
hablar de amores entre ventanas
y puertas cerradas,
iniciar el día arrancándole
a la ciudad el smog y los abrazos
atados a los sueños,
por calles y asfalto,
avenidas, callejones, parques,
buhardillas, casas y edificios,
para caminar descalzos
dialogando con las lunas.
Pero en fin,
A veces los amores son mucho mas
difíciles y complicados
que hablar de sales marinas...
y entonces quedamos
desvestidos de ellos,
usando llaves prestadas
y silencios de bienvenidas.
Y hay días tan dificiles
que rosar nuestras pieles
con el agua del tejado,
y desnudar la piel,
en casa diferente a
la tuya, es quebrar la ausencia
del sonido, con la entrega
de las cartas, acariciadas por las faltas
de ortografia.
Pero que arduo es a veces
soñar yendo hacia al gelido abismo
de las caricias, y
acallar las cita de las pasiones,
al quedar todo en suspenso,
guardando el tiempo en bolsitas
de celofan...
cuando solo veo en el espejo
de tus ojos cruces de autopista...
parqueaderos, buses y busetas,
taxis, semáforos, bancos,
cafés, y restaurantes...
... ¿y entonces? queda...
dificil hablar de amores...
Y todo queda atrapado
en tu red de pesca-
Y mi piel de madera de sauce
se siente adherida
a mi cuerpo de vaso de agua,
donde ya no se puede entrar.
Y salgo corriendo para amarte
persiguiendo rostros,
cuando solo tengo al paso:
escuelas y colegios,
venta de ropa esport,
vitrinas, mendigos
y limosneros;
Y tengo que repetirlo
que todo, absolulamente todo,
es aun mas conflictivo, cuando tengo
que entender los dias
con tu voz de atrapa sueños
desvaneciendo con la luz las pesadillas.
Y la luz del dia se vuelve
controvertida en la pluma
del escritor, refundido
con el mundo que nos distrae
y nos aparte de nuestas pieles
en los encuentros,
distrayendo el cuerpo
con conversatorios de alcaldes
y gobernantes,
concejales y dipútados,
salas cunas y maestros,
obreos, profesionales
amas de casa, peluqueros
pórteros y jardineros.
Y el mundo en conflicto
se vuelve complicado
y todo parece traumático y ENTONCES;
necesito Psicólogo de ciudad,
y el amor se queda jugando
a la golosa en tu cuerpo,
y yo me encuentro
en el camino
vendedores ambulantes
y avena de cerveza,
prostíbulos y casas de empeño,
lavanderías y expendios de carne,
y sin lugar a dudas todo se torna
complicado, y absurdo y duele la cabeza,
y puedo decirlo, y no solo decirlo
sino gritarlo, todo esto es
algo mas que todos los días...
cuando al terminar
el tiempo de los relojes,
solo quedan en mis pupilas:
ojos y manos cansadas,
pies que se arrastran
y cuerpos agitados por llegar.
Dejo entonces oficinas apagadas
y ascensores quietos,
porteros y vendedores de
lotería... y arrinconado en mi bolso
el teléfono del psiquiatra....
para no sentirme loca...
Y en este preciso instante, solo dejo
la sombra y los recuerdos...
Sin embargo a veces queda tan difícil
legar a casa, buscar las
llaves, abrir la puerta
y pensar que en la
calma de los cuartos te
estoy amando y perdiendo
las esperanzas,
mientras prendo el televisor,
la luz de la habitación
y me desvisto del
traje del día.
Que difícil encontrar
ese momento para amarte,
ahora que es de noche
y tengo sueño de madrugada,
y sobre la mesa están los recibos del:
Agua, del teléfono, del Internet,
del gas, del celular, y
la tarjeta de crédito
que nos arrastra al abogado por
haberla olvidado en el bolsillo
durante un tiempo de calendario.
Que barbaridad... hay días,
tan difícil que da hasta pereza
amar... y por hoy, solo por hoy,
estoy mejor sin ti.
