PRESAGIO
Si tú supieras que no necesitas
llaves para entrar en mi cuerpo de concierto
y cenar a la luz de un amanecer de crucigrama,
entrarías, no preguntarías, entrarías.
Si supieras que entre el humo de tango y cigarrillo
no existe el último trago de páginas inolvidables,
porque eres mi cuerpo desnudo de signos de puntuación,
inundado de aguas saladas y discos con música de bachata.
Sin pensarlo, encontrarías la
llave y sin golpear entrarías.
Si, te doy la certeza de ese
delicado tacto de tus manos
de golondrina golpeando la memoria de mi descote de impresión y tranvía.
Entonces puedes utilizar la llave, que desde
el primer día de notario, en que mis ojos huérfanos
te vieron por descuido, me vino en gana
quitar el cerrojo de la decencia y dejarte entrar.
No, ahora no lo pienses y te dejo pasar, si bien te viene en gana
con nombre fantasma y disfraz de Batman ,
para volver a empezar por una eternidad,
pero con tu cuerpo de luna y ojos que me miran y labios
que presagian que los míos te
desean,
y ese indiscutible tiempo de embargo y letra de cambio
para entrar a negociar entre sabanas el próximo encuentro.
Entraras con esas llaves y si no me encuentras,
me esperaras.
Y yo que te entregue las llaves de humo, copa y bachata,
presiento como duele esa desnudez de tu despedida,
cuando auguro que ningún día vas a
llegar …
