GUIJARROS

DEJENSE

Y si le tienes miedo a la soledad de lápiz y papel

y al encuentro de las sombras en el día

con otros amores, entonces, este amor ya no lo disfrutas,

Déjela.

Si te dejó de saborear el paladar y los viajes en globo

tienen lugares silenciosos en tu alma

para las confidencias y el museo favorito de su mirada

ha desaparecido,

Déjelo.

Si la tranquilidad de dormir sobre sabanas de colores

te hace perder la calma cuando piensas en Ella,

Déjala.

Si sus historias y sus vertientes te dejan

desnuda sin tu permiso,

Déjalo.

Si cuando caminas el calor de la ciudad y las ventanas

de tu cuerpo te ahogan pensando si te ama o no te ama,

Déjala.

Si después de un tiempo de lluvia y frió, de cobijas y besos

aun piensas que sus historias revuelcan los pasillos de

tu existencia,

déjalo.

Si el frió y el calor de las manos, los labios y la piel

aun no se estacionan en tus canciones y los abrazos

aun no te huelen a Ella,

déjala.

Si las llamadas y sus voces huelen a taberna y borracheras

de nostalgia y desesperación, sin flores y perfumes,

déjense

Si cuando  recuerda,

había cantaros de bailes de amistad y espejos de encuentros

 y eran felices

y todo se conjugaba con  el suave ruido de los días de la semana

zurciendo con la brisa las notas musicales de un arpa,

o una quebrada se llenaba de delfines rosados

gracias a los adióses que se quedan,

si, se quedanban en la imaginación, sin maquillaje y equipaje. 

Si eso ya no existe.

Déjense que viajar en compañía de espejos rotos,

es una travesía cansada.
dejen de desvestir miedos de incubadora.