BÓTALO
Bótalo todo.
Si tienes
miedos, hazlo ahora.
Si es la
política y su sucio
negocio de
historias inconclusas
date permiso
y hazlo ahora.
Si, bota
todo.
Los
colchones, sus almohadas y esas sabanas
inundadas de
pasiones
Inconclusas.
La ropa
sucia y vieja cansada de tanta sal y anilina.
Vota el
cansancio.
Los días
lunes a domingo.
Bota el olor
de tu cuerpo y los caminos que yo persigo.
Bota esas
luces para las polillas y que nos dejen las noches en paz
y abre el
armario.
Bota los
tumultos y las manifestaciones, los ruidos y los semáforos
y la música
en inglés.
Bota tus
manos y tus pies y esa forma mágica
de teñir en
frió nuestros espacios en una cita sin agua aromática.
Bota el
tratamiento para el buen genio y demás problemas de la piel
agobiada por
la venta de garaje, las ofertas y la
demanda.
Y por favor
bota el ante
penúltimo beso que no pude darte.
Bótalo todo
menos esa
ventana de las cuatro esquinas donde te veo
dibujar
tardes de vendedores ambulantes,
y puertas
metálicas para no dejar pasar la noche.
Déjame te lo
pido, déjame las esquinas.
Si, esas
cuatro esquinas con sus ventanales.
Y lo demás
bótalo todo.